Palabras perdidas
En cada esquina de una sombría ciudad
Donde los caballos cabalgan
Con sus relinches, entre viñas en el cielo
Mientras el sol quema
Todo lo que toca
Y convierte en ceniza
Toda la pasión de las carreras
Entonces
A los lejos
Entre pantalones rallados
Desarmando los colores de sus sueños
Se ve la silueta de una vieja artesana
Que hace años
Teje sus alas
Para poder montar las espaldas
De los corceles luminosos
Que acarician el ocaso
De la ciudad que siempre mira
Cuantos corazones de esta ciudad
Late con tristeza
Cuanta sangre derramada en cada sueño
No cumplido
En cada sueño nocturno
En cada pasión no acompañada
Cuantos ojos de esta cuadra
Se han opacado
Y agrietado
Estallando en lastima
Lamento, pena y llanto
Cuantas almas averiadas están
Recordando cada partida
De aquel hombre que le enseño a conducir
De aquella mujer que estaba con su delantal
Cada mañana
Cuantas manos cansadas
Nos rozan
Y se excusan
Y siguen en su mundo
Contando su historia
Su vida
Cuantas crónicas
Y reportajes
Están llenos de tinta corrida
Por el sufrimiento
De aquellas fotos
Cuanto lamento escuchamos en las cunetas
Cuanto talento mal gastado
Cuantas bocas no besadas
Cuantos niños sin dormir
Cuantas mujeres moradas
Cuantos hombres muertos
Cuanta armonía se esconde tras
La felicidad
Cuanta felicidad se esconde
Tras un rostro cansado
Y sonriente
Cuantos rostros sonríen
A pesar de tener cansancio
En sus surcos
Quizás cuantos son
Y yo aquí
Sumo el mío
